Del Imperialismo al Imperialismo Verde: Herramientas del Análisis de Sistemas-Mundo Ante la Gran Crisis Ecosocial

Alejandro Pedregal y Nemanja Lukić

La humanidad se encuentra ante la encrucijada más comprometedora de su historia. La actividad productiva antropogénica, encuadrada en el modo de producción capitalista, ha provocado la superación de una mayoría de los límites planetarios y la tensión de otros. Esto ha causado, entre otras cosas, que las temperaturas alcancen máximos nunca experimentados por nuestra civilización, que se extingan especies a una velocidad inusitada, que la pérdida de fertilidad de los suelos comience a ser norma y que los océanos hiervan hasta dejar los polos al borde de su desaparición, al tiempo que se acidifican y asfixian la vida en ellos. Simultáneamente, la misma civilización no pierde de vista un horizonte bélico cada vez más amenazante, en el que un estallido nuclear no pueda ser descartado del todo. Y sobre este escenario se despliega un declive galopante de materiales y fuentes de energía que presiona cada uno de los vectores del engranaje ecosocial, hasta el punto de ensombrecer la futura accesibilidad al sustento de nuestras sociedades y la mera supervivencia de estas tal y como las conocemos.

En medio de este panorama de devastación ecológica y escalada militar, crece la impresión, justificada y preocupante, de que los análisis geopolíticos dominantes son frecuentemente demasiado perezosos a la hora abordar el papel de los límites biofísicos del planeta en la configuración de la jerarquía global entre Estados y sus regímenes de dependencia. Y como reverso de esta impresión, pero igualmente justificada y preocupante, también crece la de que el ecologismo moderno adolece de una excesiva ingenuidad (y, a menudo, ambigüedad) para comprender las dinámicas político-económicas globales que condicionan los conflictos ecosociales.

Esta combinación de “descuidos” ha permitido a las élites capitalistas, entre muchas otras cosas, hacer propias no pocas expresiones de supuesto carácter ecologista, con el fin de proteger y perpetuar su dominio. Así, por medio de la etiqueta “verde”, el capitalismo global ha logrado actualizar su expolio planetario y humano de manera sumamente eficiente. El greenwashing o ecoblanqueo camufla los intereses de explotación y apropiación de vidas y bienes naturales sobre los que se sustenta el propio capitalismo, para adaptarlos a una terminología que allane el camino de su expansión. Se trata de la continuación del business as usual por otros medios: un nuevo modo de acumulación que tunea el negocio a la moda que marcan los tiempos de la emergencia ecológica. La “destrucción creativa” del capitalismo ve negocio en todos lados, también en el desastre.

La peligrosidad que implica este manejo de la realidad, más aún en una época signada por la combinación de crisis ecosociales, hace imprescindible identificar y desenmascarar aquellos aspectos centrales de las narrativas verdes del capitalismo global, para comprender su coyuntura y las proyecciones que permite vislumbrar. Este trabajo pretende contribuir al estudio de la relación entre imperialismo y ecología política, las características que identifican el desarrollo histórico del imperialismo ecológico y las implicaciones ecosociales de su adaptación cosmética, en un contexto de creciente amenaza y preocupación biofísica. Para ello se hace imprescindible, antes de nada, ofrecer una definición actualizada, si bien sucinta, de la noción de imperialismo.


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